Blogia
Obras de Diego Catalán

47.- 10. TOPONIMIA CRISTIANA

47.- 10. TOPONIMIA CRISTIANA

10. TOPONIMIA CRISTIANA. III. ESPAÑA EN LA ROMANIA

      A partir del siglo IV en que el cristianismo sustituyó ofi­cialmente al paganismo, muchos lugares recibieron el nom­bre de la iglesia que ocupaba el sitio principal del poblado o que venía a ser centro de las casas que en su inmedia­ción se construían. De ahí nombres de lugar Iglesia, Igle­sias; Iglesario; Iglesuela Teruel, Toledo, Grisuela Zamora, León, Grijoa en Galicia; Grijalba Burgos, Coruña, Zamora < eclesia alba; Grijota Palencia < eclesia alta; Grisaleña Burgos. En el siglo IV mismo, y en la Baja Edad Media, se aplicó el grecismo basilica ’regia’ > ’palacio, edificio público’ a la iglesia conmemorativa de un mártir, de donde Baselga Portugal, Baselgas Asturias, Veselga Valen­cia 234. Una forma secundaria era basilia, de donde Basella Lérida.

      Pero más común era que el lugar tomase por nombre el del santo a quien la iglesia o basílica estaba dedicada. Como esta costumbre continuó durante siglos, buscaremos los to­pónimos hagiográficos primitivos en aquellos que adheri­dos al suelo han evolucionado fonéticamente con el lengua­je hablado sobre ese suelo. Así, hallamos que varios san Félix que predicaron el cristianismo en España y sufrieron martirio en Sevilla, en Gerona o en Játiva tuvieron culto muy extenso: en regiones donde la f- se conserva, el abla­tivo o genitivo locativo 235 sancti Felīcī o Felicīs da San Fiz León, Sanfiz y Safiz Galicia, San Feliz León, San Felices Salamanca (forma conservada por cultismo en Burgos, Soria, Santander, etc.), San Feliu Gerona, Pyrénées Orientales; y en las regiones que perdieron la f- desde muy antiguo, se conservó la t por quedar ante vocal: Santelices Burgos y Saint-Élix Haute-Garonne y Gers 236, siendo nota­ble la coincidencia de los dos solares de la pérdida de f-, Castilla y Gascuña; donde la f- se perdió más tarde, la t se perdió en grupo de tres consonantes, y nf pasó a f y a cero: Sahelices Saelices León (tres), Valladolid, Salamanca, Guadalajara, Madrid, Cuenca 237. Como este último caso, donde desaparece -n(t)f- en regiones que perdieron la f tar­díamente tenemos Sancti   Facundi > Sanfagún, Safagún, Sahagún León, en memoria de los santos Facundo y Primitivo, martirizados hacia el 304 a orillas del Cea, don­de se alzó el monasterio que dio nombre a la villa. La v, consonante sonora correspondiente a la f, da igual resulta­do en el grupo nv: Sancti Victoris (Víctor, mártir de Braga) > *Sanvechores, *Savechores, Sahechores León; mien­tras que por cultismo se conserva San Vitores en Santander.

      Al lado de Santelices, agrupación de la t de Sant- con la vocal siguiente, después de pérdida muy temprana o voca­lización de la consonante inicial, hay que poner -nt(g)- -nt(j)-en una región más extensa que la de -nt(f)-:  Sancti Gervasi (Gervasio, mártir en Milán bajo Nerón) > Santervás Palencia, Valladolid, Soria; Sancti Justī (el niño Justo  fue  martirizado  con  Pastor,   su  compañero,   en Complutum, Alcalá de Henares, en tiempo de Diocleciano, en el año 304) > Santiuste Guadalajara, Soria, Sego­via, Ávila, Burgos (la forma culta es San Just Lérida, Gero­na); Sancti Georgī (mártir de Capadocia en el 303, el caballero santo) > Santurce Vizcaya y con disimilación Santiurce Santander, Santurde Álava, Burgos, Logroño; pero Santiorjo Galicia, Sanjurdo Pontevedra, San Jorde Palencia, Sanjurjo Orense, Sanjurge Portugal; Sancti Johannis (aludiendo al santo Bautista o al Evangelista) > Santianes Asturias (varios); Santiaes Portugal, Santibáñez (varios) Astu­rias,  Castilla;  Seoanes, Soane, Sebane  Galicia;  Sancti Julianī (san Julián el Hospitalario, que daba buen alber­gue y «buena estrena» al caminante, según el cuento de Boccaccio y la serranilla del Marqués de Santillana) > Santillán Santander, Burgos, Málaga, Santullán 238 Santander, o en nominativo, Santullano Asturias, Santulhão Portugal; Juliana > Santillana Santander, Palencia, Segovia.

      A Tyrsus (mártir en Asia Menor hacia el 250, nacido en Toledo, y tenía templo en Toledo en época visigoda) se dedican Santiz Salamanca, Santotís Santander, Burgos, Valladolid, Guadalajara, o sin forma de locativo, Santiso Galicia, Santirso Oviedo, Santo Tirso León, Santo Thyrso Portugal.

      Sancti Quīrĭcī (Quirico, mártir en Tarso de Cilicia con su madre Julita en la persecución de Diocleciano, en el año 304, muy venerado en la cristiandad 239) > San Quirce Burgos, Valladolid, Sant Quirse Barcelona, Gerona.

      Los santos cuya fama fue recogida y a su vez divulgada por Prudencio en los himnos de su Peristephanon, dan to­pónimos que en su mayoría remontan a la época romana: Sancti Cyprianī > Sancibrián, Sancibrao Galicia, San Cebrián Santander, Palencia, Zamora, Valladolid, Toledo; Cipriano (himno 13°) 240, el famoso obispo y escritor cartaginés, mártir en la persecución de Decio en el 257, con culto toponímico en otros países, Saint Civran, Saint Cyprien, etc., en Francia 241, en Italia, muchos San Cipriano. Lo mis­mo San Román (himno 10°, el más extenso), diácono de Cesárea, San Lorenzo (himno 2°), cantados por Prudencio.

      Entre los santos españoles de culto más antiguo está Eulalia evolucionando en Santolaja o Santa Olaja Burgos, Valladolid; Santolalla Burgos, Santander, León, Valladolid, Salamanca, Toledo, Huelva, Almería, Teruel; Santa Olaria Zaragoza, y en regiones donde se pierde la -l- intervocáli­ca, Santalla Coruña, Lugo, León, o en genitivo locativo Santalle (ay. Castropol) Asturias Occidental de habla galle­ga; conservado el nombre intacto por cultismo Santa Eula­lia Zaragoza, Logroño, Gerona, Mallorca, Portugal, y en el Sur de Francia Sainte Eulalie, Sainte Aulazie, Sant-Aulaye, etc 242. El culto empero fue mucho más extenso; en el Nor­te de Francia se compuso la Cantilena de Santa Eulalia del siglo IX. Todos reflejan el nombre de la infantil mártir de Mérida, en la persecución de Diocleciano en el año 304 243, cantada en el himno 3° de Prudencio, si bien un piadoso tarraconense del siglo VII, por amor a su patria chica, creó un «hecho diferencial», suponiendo una Eulalia mártir de Barcelona aunque en todo igual a la de Mérida 244. A Emeterio y Celedonio, mártires en Calahorra ensalzados en el himno 1° del Peristephanon está dedicada la iglesia de Sant Emder > Santander, y con nombre de cuño bien posterior bien semiculto, San Mederi Álava, San Medel Burgos, San Meder Pontevedra, Santo Medero Asturias, San Medir Grana­da (Saint Médier Gard, Saint Hymetière Jura)245.

      Al obispo Fructuoso del himno 6°, gladiador de Cristo, quemado en el circo de Tarragona en el 259 (o a san Fruc­tuoso de Braga obispo de Dumio) está dedicado San Frechoso de Oviedo.

      No ofrecen observaciones interesantes los dos mártires de Zaragoza San Vicente diácono y Santa Engracia (himnos 4° y 5°) muertos en 304 246. El culto toponímico del primero es muy extenso; el de la segunda se agrupa en el Este de la Península (Huesca, Lérida, Soria, Logroño, Guipúzcoa) y en el Sur de Francia (Basses Pyrénées)247.

      El asiento de estos nombres hagiográficos sobre el suelo de la Península precedió a la evolución del latín en los varios dialectos españoles. Pero esto es sólo cuando la evolución fonética ha fundido el adjetivo sanctu- con el antroponímico o cuando se halla en locativo, genitivo o ablativo. Si la evolución ataca solamente al nombre en acusati­vo, pudo éste evolucionar como nombre profano antes de recibir culto, como ocurre en Sanpayo Galicia < Pelagius, alusivo al Pelayo martirizado en época musulmana en Córdoba, año [925].

      Por su complicada evolución fonética, indicadora de cul­to primitivo, merece citarse Sancta Euphemia (mártir en Calcedonia de Bitinia el año 307), que además de su nombre intacto, S. Eufemia Vizcaya, S. Euphemia varios pue­blos de Portugal y en Francia 248, ofrece la sonorización de f y pasa de m > n por confusión con Santa Eugenia (mártir en Roma hacia 258) de que hay pueblos con nom­bre intacto en Gerona, Mallorca y Portugal. El cruce de los dos nombres produce Santovenia Burgos (parroquia de Santa Eugenia), Segovia (parroquia de Santa Eufemia) y Zamora (parroquia de Santa María).

      Además en locativo Sancti. Sancti Auditi (santo honrado en Braga)249.

Sabemos que dom(i)na designaba antonomásicamente a la Virgen 250 (comp. el tratamiento mioña ’mi señora’, Rodrigo Toledano, De rebus Hispaniae 251), pues esto nos ex­plicaría el nombre de Santoña cuya parroquia es «Santa María del Puerto»; compárese el nombre de Covadonga < cova domnĭca, por existir en ella, antes de la famo­sa batalla, una ermita de la Virgen 252; y creo, aunque no tengo ejemplos, que se usaba con adjetivo, sancta (d)omina.

Diego Catalán: Historia de la Lengua Española de Ramón Menéndez Pidal (2005)

NOTAS

234  Menéndez Pidal, Orígenes del esp., p. 252 (ed. 1950, p. 245).

235  Grandgent, Lat.  Vulg., § 86.

236  Longnon, Les noms de lieu, § 1736.

237  Para la evolución del grupo -ntf- en estos nombres, véase Menéndez Pidal, Orígenes del esp., p. 227 (ed.  1950, p. 213).

238 El Santullán de Santander tiene como patronos a San Julián y Santa Basilissa (que U. Chevalier, Repertorium himnologicum (1892-1904 y 1921), s.v. «Basilissa», identifica con el Hospitalario).

239  En Francia hay topónimos Saint Cirice, Saint Cys, etc. y en Italia multitud de San Quirico.

240  «Mártir de África pero de corazón nuestro», dice Prudencio a causa de la famosa epístola a León, Astorga y Mérida; nota de Arévalo (Migne, Patrología Latina, LX, col. 571 n.) que manda ver Esp. Sagr., XXXIV, p. 89.

241  Longnon, Les noms de lieu, § 1686.

242  Longnon, Les noms de lieu, § 1722.

243  Según Chevalier, Rep. himn.  (1892-1904 y 1921).

244  Véase H. Leclercq, «Eulalie de Mérida et de Barcelone», en el Dictionnaire d’Archéologie chrétienne et de Liturgie, p.p. F. Cabrol, t. V, col. 705 ss.

245  Longnon, Les noms de lieu, § 1711.

246  Chevalier, Rep. himn.  (1892-1904 y 1921).

247  Longnon, Les noms de lieu, § 1712.

248  Longnon, Les noms de lieu, § 1724.

249  Esp. Sagr., XV, p. 295.

250  Domina designa a la Virgen sin adición de Nostra (Du Cange, Glossarium).

251  Lib. V, cap. III (ed. Padres Toledanos, t. III, Madrid, 1793).

252  Menéndez Pidal, Orígenes del esp., p. 181 (ed. 1950, p. 163).

CAPÍTULOS ANTERIORES:

PARTE PRIMERA: DE IBERIA A HISPANIA
A. EL SOLAR Y SUS PRIMITIVOS POBLADORES

CAPÍTULO I. LA VOZ LEJANA DE LOS PUEBLOS SIN NOMBRE.

1.- 1.  LOS PRIMITIVOS POBLADORES Y SUS LENGUAS

2.- 2. INDICIOS DE UNA CIERTA UNIDAD LINGÜÍSTICA MEDITERRÁNEA

3.- 3. PUEBLOS HISPÁNICOS SIN NOMBRE; PIRENAICOS Y CAMÍTICOS

CAPÍTULO II. PUEBLOS PRERROMANOS, PREINDOEUROPEOS E INDOEUROPEOS

4.- 1. FUERZA EXPANSIVA DE LOS PUEBLOS DE CULTURA IBÉRICA

5.- 2. NAVEGACIÓN DE FENICIOS Y DE GRIEGOS EN ESPAÑA

6.- 3. LOS ÍBEROS Y LA IBERIZACIÓN DE ESPAÑA, PROVENZA Y AQUITANIA

7.- 4. FRATERNIDAD ÍBERO-LÍBICA

*   8.- 5. LOS LÍGURES O AMBRONES

*   9.- 6. LOS ILIRIOS

*   10.- 7. LOS CELTAS

*   11.- 8. «NOS CELTIS GENITOS ET EX IBERIS» (MARCIAL)

12.- 9. PERSISTENCIA DE LAS LENGUAS IN­DÍGENAS EN LA PROVINCIA ROMANA DE HISPANIA

B. LAS HUELLAS DE LAS LENGUAS PRERROMANAS EN LA LENGUA ROMANCE

CAPÍTULO III. RESTOS DE LAS LENGUAS PRIMITIVAS EN EL ESPAÑOL

13.- 1. VOCABLOS DE LAS LENGUAS PRERRO­MANAS

14.- 2. SUFIJOS PRERROMANOS EN EL ESPAÑOL

15.- 3. LAS LENGUAS DE SUBSTRATO EN LA FONÉTICA ESPAÑOLA

16.- 4. RESUMEN DE LOS INFLUJOS DEL SUBSTRATO

PARTE SEGUNDA: LA HISPANIA  LATINA
A. LA COLONIZACIÓN ROMANA Y LA ROMANIZACIÓN

CAPÍTULO I. HISPANIA PROVINCIA ROMANA

* 17.- 1. CARTAGO Y ROMA. LA PROVINCIA ROMANA DE HISPANIA Y SU EXPANSIÓN DESDE EL ESTE AL OESTE

18.- 2. LA ROMANIZACIÓN

19.- 3. ESPAÑA Y LA PROVINCIALIZACIÓN DEL IMPERIO

20.- 4. PREDOMINIO DEL ORIENTE. EL CRISTIANISMO

CAPÍTULO II. EL NUEVO LATÍN

21.- 1. ¿LATÍN VULGAR?

22.- 2. EL LATÍN NUEVO

23.- 3. INFLUJO DEL CRISTIANISMO

24.- 4. NEOLOGISMOS DEL VOCABULARIO DOCTO

25.- 5. NEOLOGISMOS DE ESTILÍSTICA COLEC­TIVA

26.- 6. ACEPCIONES NUEVAS

27.- 7. FRASEOLOGÍA

28.- 8. MÓVILES DEL NEOLOGISMO GRAMA­TICAL

29.- 9. CAMBIOS EN LA FLEXIÓN Y SINTAXIS DEL NOMBRE

30.- 10. CAMBIOS EN LA FLEXIÓN Y SIN­TAXIS DEL VERBO

31.- 11. PREPOSICIONES Y ADVERBIOS

32.- 12. COLOCACIÓN DE LAS PALABRAS

*   33.- 13. EVOLUCIÓN DEL SISTEMA VOCÁLICO

34.- 14. EVOLUCIÓN DEL SISTEMA CONSO­NÁNTICO

*   35.- 15. OTRAS SIMPLIFICACIONES FONÉTICAS

*   36.- 16. LARGA LUCHA ENTRE INNOVACIÓN Y PURISMO

*   37.- 17. LAS INSCRIPCIONES

B. EL LATÍN DE HISPANIA

CAPÍTULO III. ESPAÑA EN LA ROMANIA

*   38.- 1. LA ROMANIA

*   39.- 2. CAUSAS DEL DIALECTALISMO RO­MÁNICO

*   40.- 3. ROMANIA OCCIDENTAL, ROMANIA MERIDIONAL

*   41.- 4. TRES ZONAS DE COLONIZACIÓN DE ESPAÑA

*   42.- 5. ESPAÑA Y LA ITALIA MERIDIONAL

*   43.- 6. ARCAÍSMO PURISTA DEL LATÍN DE ESPAÑA

*   44.- 7. RELACIONES ENTRE EL LATÍN HISPA­NO Y EL DE LA ROMANIA MERIDIONAL: VOCABULARIO Y FORMACIÓN DE PALABRAS

45.- 8. FONÉTICA DIALECTAL EN EL LATÍN DEL SUR DE ITALIA Y DE LA HISPANIA CITERIOR

*   46.- 9. UNIDAD Y DIVERSIDAD EN EL LA­TÍN DE HISPANIA

Diseño gráfico:
 
La Garduña Ilustrada

Imagen: letra Z, alfabeto anglosajón, siglo VIII-IX

0 comentarios