275.- 3. OPOSICIÓN LEVANTINA Y ARAGONESA AL EXCLUSIVISMO CASTELLANO

01 de agosto de 2012 - 19:41 - I.- HISTORIA DE LA LENGUA ESPAÑOLA DE RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL

3. OPOSICIÓN LEVANTINA Y ARAGONESA AL EXCLUSIVISMO CASTELLANO. X. ASPIRACIÓN A UNA NORMA LINGÜÍSTICA NACIONAL

A echar por tierra un muy cerrado criterio local contribuía el gran número de escritores no castellanos que afirmaban su competencia para cultivar la lengua común, unos estudiándola en los libros, como se aprendían las lenguas clásicas, otros estimando su naturaleza aragonesa o andaluza por tan apropiada como la castellana. Ahora se producen entre varios escritores españoles actitudes semejantes a las que antes manifestaron en Italia varios escritores no toscanos como Castiglione y Trissino _¹¹.

El valenciano Juan Martín Cordero, autor de una Ortografía en 1556, protesta que, aunque no le es natural el castellano, es muy aficionado a esta lengua, la «más divulgada por el mundo que se trata», y «no deve darse alguno a entender que, por no ser uno de Castilla, no puede saber la manera de escrevir mejor que muchos que lo son, porque sería persuasión muy poco cuerda y no menos que quien dixesse no dever escrevir latín sino quien fue latino, ni griego sino aquel que nació en Grecia» _¹².

Después, la anónima gramática, impresa en Lovaina 1559, que parece obra de un levantino o aragonés, defiende para la lengua común el nombre de «Lengua vulgar de España, porque se habla i entiende en toda ella generalmente». No le contenta la simple denominación de «Lengua Española», y con furioso calor rechaza el nombre de Lengua Castellana, «nombre ambicioso i lleno de imbidia, pues es más claro que la luz del sol que los reinos de León y Aragón tienen maior y mejor derecho en la lengua vulgar que no el reino de Castilla», porque Castilla fue sacada del dominio de la lengua arábiga de los moros por los reyes de León y de Aragón, y fue condado sujeto a León. Sin embargo, el autor reconoce que «no paresce desaforado» el que se diga que la lengua florece más en Castilla. Pero el Anónimo quiere recalcar que no floreció Castilla siempre; identifica el catalán con el provenzal, y ensalza «las muy antiguas obras de los provençales» como literatura segunda en importancia dentro de España, siendo primera la de la lengua árabe hablada en Granada y Valencia, dos literaturas más antiguas que la de la Lengua Vulgar (o Española) _¹³.

Por su parte, el aragonés Bernardino Gómez Miedes, al publicar su Historia de don Jayme el Conquistador, 1584, rechaza la censura que algunos le hacen porque, siendo él «natural aragonés», escribe en lengua peregrina castellana; más peregrino le era el latín y el estudio se lo hizo familiar, «mayormente no siendo la lengua aragonesa agena, sino muy hermana de la castellana, y que no sólo se tratan y entienden los dos desde su origen acá, pero aun quasi con las mesmas palabras, letras y acentos, que su común madre la latina les dio, se escriven y pronuncian». Los aragoneses no hablan un «castellano grosero y bastardo», sino que su lengua deriva directamente del latín lo mismo que el castellano, y aun su pronunciación es más fiel a la latina que la castellana, si bien por otro lado debe reconocerse lealmente que el castellano alcanzó más lucidez y precisión: «porque a la verdad los castellanos tienen los conceptos de las cosas más claros y assí los explican con vocablos más propios y bien acomodados, de más que, por ser de sí eloqüentes en el dezir, tienen más graciosa pronunciación que los aragoneses». Por todo esto, Gómez Miedes usa, al lado del nombre de lengua castellana, el de lengua española, o si es preciso mayor especificación: lengua española assí castellana como aragonesa _¹⁴.

Diego Catalán: Historia de la Lengua Española de Ramón Menéndez Pidal (2005)

NOTAS

11 Véase arriba, cap. II, § 4.

12 La manera de escrevir en castellano o para corregir los errores generales en que todos casi yerran, Amberes, 1556, fols. 107, 108, 111-112.

13 Folio 2r. y v.; véase también Viñaza, Bibl. Filol. Cast., 1893, col. 504-505.

14 La Historia del muy alto... Rey don Jayme..., compuesta primero en lengua latina por el maestro Bernardino Gómez Miedes... canónigo de Valencia, agora nuevamente traducida por el mismo autor en lengua castellana, Valencia 1584. Las citas que hago son del Prólogo al Lector y de la p. 254. En la p. 154b habla de lengua española moderna por contraposición a la vizcaína. En la Dedicatoria y al comienzo del Capítulo I dice sacar de la Crónica catalana del rey los grandes hechos «encerrados debaxo su corta lengua lemosina» a «las dos más generales y más estendidas lenguas que hoy se hablan en el universo, latina y española», «las dos más estendidas y comunicables lenguas, la latina y castellana».

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